12, Enero 2021
El estrés depende de cómo percibimos la realidad
Es muy común que las personas imaginemos cosas que aún no sucedieron o no van a suceder. El estrés tiene que ver con la subjetividad en la vida.
La realidad son los hechos interpretados conforme a nuestros propios procesos psíquicos. Hay un área en la medicina que se llama psiconeuroinmunoendocrinología (PNIE) y que se dedica a estudiar el cuerpo en su totalidad: psico es mente; neuro, sistema nervioso; inmuno es inmunidad; endocrinología significa hormonal. Lo que pasa en nuestra mente, se transmite al cuerpo. Es muy importante prestarle atención a las cuestiones que realmente lo merecen y no porque estemos exagerando, en otras palabras, debemos ver lo que realmente sucede a lo que nosotros pensamos que está sucediendo.
Mucho depende de nuestra personalidad, de nuestra conducta estable en el tiempo. Hay “Personalidades Tipo A” (aquellas que se estresan con facilidad y acumulan cargas grandes en la vida) que se caracterizan por ser dinámicas, activas, muy competitivas, que no tienen espacios libres, son muy puntuales y lo hacen notar. Esas personas siempre están haciendo cosas, todo el tiempo, hablan rápido y son impacientes. Este tipo de forma de ser fue descrita en 1957 por los profesores Roseman y Friedman en California, y se hicieron muchos estudios respecto a eso. Las “Personalidades Tipo B” son tranquilas y pacientes aunque menos productivas. Se toman su tiempo de reflexión y no tienen demasiada resistencia al cambio. Muestran sensibilidad y empatía hacía los demás, pudiendo en ocasiones olvidar sus propias necesidades o derechos.
Los beneficios para la salud se relacionan con la capacidad de recuperar el equilibrio emocional tras una crisis, gestionar ese estrés y balancear el sistema nervioso simpático y parasimpático. Generalmente pensamos que una enfermedad es la culpable de ese dolor de cabeza irritante, del insomnio o menor productividad en el trabajo, pero muchas veces el estrés es la causa según especialistas de Mayo Clinic (EEUU). Reconocer esto puede ayudar a controlarlos y tomar medidas para disminuirlo como hacer actividad física con regularidad; practicar meditación, yoga, taichi o masajes; mantener el sentido del humor, pasar tiempo con familia y amigos; tener tiempo de ocio. Evitar el uso de tabaco, cafeína y alcohol. Recuerde: no importa lo que sucede sino lo que yo creo que sucede. La realidad es subjetiva.