Saludablemente

12, Enero 2021

¿Todos sentimos envidia?

Una foto que da envidia
Una foto que nos da envidia

Arranquemos la nota con sinceridad, ¿quién no sintió un leve ardor en el pecho al ver a alguien con vacaciones en Maldivas o alguna isla caribeña mientras uno/a está peleando con el lavarropas? O cuando un compañero de trabajo llega con un ascenso que ni sabías que existía. 

La lista puede seguir, porque los motivos de envidia pueden extenderse como personas en el mundo. A los que le queda el pelo perfecto, incluso debajo de la lluvia, los que encuentran descuentos que nadie vió, los que sin estudiar aprueban los exámenes, etc. Inserte aquí, a qué le tiene más envidia cada uno.

La envidia, ese sentimiento que jamás confesamos en voz alta, pero que se pasea por la mente de todos.

Con el estreno de una nueva temporada de “Envidiosa”, la serie que nos muestra cómo la envidia que siente el personaje principal, se transforma en la protagonista misma, nos animamos a preguntarnos: ¿qué pasa cuando este sentimiento se instala en nuestra vida? 

¿La envidia es tan mala como la pintan?

La envidia puede ser graciosa cuando es ajena, pero si se queda demasiado tiempo en nuestra propia vida, puede convertirse en un problema.

Se podrían considerar dos tipos principales:

  • Envidia destructiva, esa que nos amarga el día y nos hace querer que al otro le vaya mal (spoiler: esto no ayuda en nada).
  • Envidia motivacional, que nos inspira a mejorar y alcanzar lo que admiramos en los demás.

Cuando aprendemos a canalizar la envidia de manera positiva, se transforma en un motor que nos impulsa a crecer. En cambio, si dejamos que nos carcoma por dentro, puede generar estrés, ansiedad y un malestar emocional que impacta directamente en nuestra salud física, emocional e incluso mental.

Evitar que la envidia nos enferme

Si cada vez que ves una historia de Instagram de alguien logrando algo y te invade un calor interno, acá van algunos consejos para gestionar la envidia de manera saludable:

🙏🏽Practicar la gratitud: Compararte constantemente con los demás es una receta segura para la frustración. En cambio, enfocarte en lo que logras te ayuda a valorar tu propio camino.

🧘🏽‍♀️Transformar la envidia en inspiración: En lugar de resentirte, analiza qué podés aprender de esa persona que admiras (o envidias, seamos honestos).

🤳🏽Desconectar un poco de las redes sociales: Instagram y TikTok son vitrinas de lo mejor de la vida de los demás, pero no reflejan la realidad completa. Hacer una pausa digital puede ayudarte.

😎Trabajar la autoestima: Muchas veces, la envidia nace de la inseguridad. Construir confianza en uno mismo reduce esa sensación de que los demás tienen lo que nos falta.

🥰Rodearte de gente positiva: Compartir tiempo con personas que celebran tus logros en lugar de competir contigo ayuda a mantener una mentalidad más saludable.

La envidia en la salud

Cuando la envidia se vuelve crónica, el estrés y la ansiedad pueden impactar en el cuerpo. Dolores de cabeza, insomnio y problemas digestivos pueden ser señales de que este sentimiento está tomando demasiado espacio en la vida.

Así que, si bien es normal sentir envidia de vez en cuando, lo importante es no dejar que avance. Si considerás que te un problema serio con la envidia, tal como la protagonista de la serie, podés acudir a la ayuda profesional de un psicólogo/a.

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