12, Enero 2021
La “moda” de las cirugías estéticas
Continúan las investigaciones que sostienen que existe una relación directa entre el uso desmedido de redes sociales y la necesidad de someterse a cambios estéticos.
Un reciente estudio, llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Boston, demostró el impacto del uso de RRSS (como Instagram, Facebook, Twitter y TikTok) en el deseo de las personas de someterse a procedimientos de cirugía estética.
La investigación revela una conexión directa entre el tiempo invertido en estas plataformas digitales y una mayor probabilidad de buscar cambios físicos a través de intervenciones quirúrgicas, en un intento de parecerse a versiones altamente idealizadas de sí mismos o con la intención de simular rasgos de otros
Este fenómeno, conocido como “dismorfia de Snapchat”, fue identificado por primera vez en 2019, y revela cómo el uso intensivo de filtros y ediciones de fotografías en redes sociales puede distorsionar la percepción que una persona tiene de su propia imagen.
Esta condición puede llevar a cada individuo a buscar cambios físicos reales que coincidan con las versiones editadas de sí mismos publicadas en la red. De manera similar, este término refleja cómo las alteraciones digitales pueden generar expectativas poco realistas y, a menudo, inalcanzables sobre la apariencia física.
Los investigadores se centraron en analizar el comportamiento de los usuarios que dedican una cantidad significativa de tiempo a seguir a celebridades y consumir contenido visual altamente editado y filtrado en estas plataformas. Los hallazgos indican que este grupo de usuarios es particularmente vulnerable a la insatisfacción corporal y, como resultado, muestra una tendencia mayor hacia la consideración o realización de cirugías estéticas.
Esta problemática es particularmente significativa entre los usuarios más jóvenes. Este estrato social es el que, en general, pasa mayor cantidad de tiempo en estas plataformas, lo que lo expone a contenidos visuales que frecuentemente han pasado por procesos de edición exhaustivos.
Asimismo, el estudio subraya una preocupación creciente sobre cómo la idealización de la apariencia física, influenciada en gran parte por figuras públicas y celebridades en redes sociales, puede tener implicaciones profundas en la salud mental y la autoaceptación de los individuos.