12, Enero 2021
Ecoansiedad: el costo emocional del planeta
Sentir preocupación por el cambio climático es natural, pero cuando esa preocupación se vuelve constante y angustiante, puede afectar nuestra salud mental. ¿Qué es la ecoansiedad y cómo podemos manejarla?

La ecoansiedad es una forma de angustia y malestar emocional provocada por la preocupación constante sobre el futuro del planeta. Aunque no está reconocida como un trastorno mental, su impacto en la vida diaria es real y evidente.
Según la Asociación Estadounidense de Psicología (APA), este tipo de ansiedad se caracteriza por un temor crónico a sufrir una catástrofe ambiental, generado por la sensación de que los daños causados por el cambio climático son irreversibles. También incluye la angustia por el futuro de uno mismo y el de las generaciones futuras.
¿Cómo afecta a la salud mental?
La exposición constante a noticias sobre incendios forestales, inundaciones, sequías o pérdida de biodiversidad puede generar un nivel alto de estrés. Este malestar puede manifestarse con síntomas como:
- Problemas para dormir o descansar.
- Dificultades para concentrarse.
- Alteraciones en el apetito.
- Sensación de tristeza o desesperanza.
- Irritabilidad o frustración frente al contexto ambiental.
- Pérdida de interés por actividades recreativas que antes disfrutaba.
La buena noticia: se puede manejar y superar
Si bien la ecoansiedad es un fenómeno en crecimiento, también puede transformarse en una herramienta para el cambio.
Los especialistas recomiendan limitar la exposición a noticias que alarman y buscar fuentes de información confiables, que ofrezcan soluciones y acciones positivas. Además, involucrarse en actividades como reducir el consumo de plásticos, reciclar, consumir de forma consciente o plantar árboles, pueden ser positivas al generar una sensación de control y propósito.
También es fundamental hablar del tema. Buscar apoyo y compartir los sentimientos con amigos, familiares o profesionales de la salud mental ayuda a aliviar la carga emocional. Y para bajar el nivel de ansiedad, se recomienda practicar técnicas de relajación como meditación, yoga, caminar al aire libre o simplemente una respiración profunda.
Un estudio de The Lancet reveló que más de la mitad de los jóvenes de entre 16 y 25 años en diez países sienten ansiedad e impotencia frente al cambio climático.