12, Enero 2021
Día Mundial sin Tabaco: ¿qué pasa en el cuerpo cuando fumamos?
El tabaco es el único producto de consumo legal que mata hasta la mitad de sus consumidores cuando se utiliza exactamente de acuerdo a las indicaciones del fabricante. Aprovechamos esta fecha para contarte cuáles son los efectos que fumar provoca en tu cuerpo.
Hoy, como cada 31 de mayo, se celebra el Día Mundial sin Tabaco, reconocido oficialmente por la Organización Mundial de la Salud.
De acuerdo con el organismo internacional, hay 1.300 millones de consumidores de tabaco en todo el mundo y, entre fumadores activos y pasivos, mueren cerca de 8 millones de personas por año. La esperanza de vida de los fumadores es al menos 10 años menor que la de los no fumadores.
¿Qué sustancias contienen los productos de tabaco?
Nicotina: es el principal compuesto adictivo del tabaco. Cuando se inhala, se absorbe en el torrente sanguíneo y llega al cerebro, donde estimula la liberación de dopamina, un neurotransmisor asociado con la sensación de placer y recompensa.
Alquitrán: es una sustancia pegajosa y oscura que se forma durante la combustión del tabaco y se deposita en los pulmones y las vías respiratorias
Monóxido de carbono: es un gas tóxico que está presente en el humo del tabaco. Se une a la hemoglobina en la sangre y disminuye su capacidad para transportar oxígeno a los tejidos.
Formaldehído: es una sustancia química utilizada para fabricar productos como resinas y plásticos. Se encuentra en el humo del tabaco y está asociada con el riesgo de cáncer.
Amoníaco: es una sustancia que se utiliza en la fabricación de productos de limpieza y fertilizantes. En el tabaco, el amoníaco ayuda a liberar más nicotina.
¿Qué sucede en nuestro cuerpo y organismo cuando fumamos?
Cuando una persona fuma, el humo entra en su boca, garganta, pulmones y sistema circulatorio. Esto genera consecuencias sobre:
El sistema respiratorio: el humo irrita y daña los pulmones, lo que puede provocar tos crónica, dificultad para respirar y enfisema, una enfermedad que destruye progresivamente las pequeñas bolsas de aire en los pulmones, donde ocurre el intercambio de oxígeno y dióxido de carbono.
El sistema cardiovascular: aumenta la presión arterial y el ritmo cardíaco, lo que puede causar enfermedades coronarias, ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares.
El sistema inmunológico: se debilita la capacidad del cuerpo para combatir infecciones y enfermedades respiratorias.
El sistema nervioso: a medida que crece la adicción a la nicotina, el cerebro se adapta y necesita niveles cada vez mayores para experimentar los mismos efectos de placer y recompensa.
Sistema digestivo: aumenta el riesgo de desarrollar úlceras pépticas, enfermedad de reflujo gastroesofágico y cáncer de estómago.
Sistema reproductivo: puede afectar la fertilidad, tanto en hombres como en mujeres. En las mujeres, puede interferir con el ciclo menstrual y causar problemas de concepción, mientras que en los hombres puede causar disfunción eréctil.
Piel y apariencia: contribuye a la formación de arrugas, manchas y un tono de piel apagado. Puede provocar la aparición de acné y psoriasis.
Fumar es el factor que más altera las defensas, incluso años después de dejarlo