12, Enero 2021
Kale: la verdura rica en calcio que fortalece los huesos y mejora la memoria
También conocida como col rizada, el kale combina vitaminas y nutrientes que aportan beneficios para la salud ósea y la función cognitiva.
El kale es una verdura que pertenece a la familia de las crucíferas, la misma que incluye vegetales como la coliflor, el repollo, el brócoli y las coles de Bruselas.
Sus hojas son grandes y de color verde oscuro, aunque puede presentar tonalidades más claras o incluso púrpuras (similar al color de la remolacha).
Actualmente, el kale ha ganado popularidad en la cocina saludable y se lo considera un “superalimento” por sus propiedades nutritivas.
Fortalece los huesos
El kale es un alimento muy recomendado para mantener los huesos en buen estado debido a su contenido de calcio, que es más alto que el de la leche de vaca (aproximadamente 135 miligramos cada 100 gramos).
Esta verdura también contiene vitamina C, vital para la producción de colágeno, que es una proteína esencial para mantener la estructura y la integridad de los tejidos, incluyendo los huesos y las articulaciones.
Mejora la memoria
El kale está cargado de antioxidantes como la vitamina C, el betacaroteno y otros carotenoides que combaten el estrés oxidativo en el cerebro y en el cuerpo. Estos antioxidantes ayudan a prevenir el daño celular y a proteger contra enfermedades neurodegenerativas, contribuyendo a una mejor salud cognitiva y memoria.
Además, el ácido fólico, una vitamina B presente en este vegetal, ayuda a reducir los niveles de homocisteína, un aminoácido asociado con un mayor riesgo de deterioro cognitivo. El kale también contiene ácido alfa-linolénico (ALA), un tipo de omega-3 beneficioso para la salud cerebral y la función cognitiva.
Alto contenido en vitamina K
La vitamina K es necesaria para la coagulación sanguínea y para promover la fijación del calcio en los huesos. Una taza de kale proporciona hasta siete veces la cantidad diaria recomendada de vitamina K para un adulto.
En resumen, la combinación de calcio, vitamina K, vitamina C, antioxidantes y otros nutrientes convierten al kale en un alimento valioso para fortalecer los huesos y mejorar la memoria y la función cognitiva.
Cómo incorporar kale en las comidas
El kale se puede poner en la ensalada o en un sándwich (en reemplazo de la lechuga o la rúcula, por ejemplo), pero también incluirlo en recetas simples, ricas y muy saludables. Se puede freír, hornear o hervir y queda con sus propiedades intactas.
Algunas ideas: licuarlo en crudo junto con apio, pepino manzana y jengibre; cocinarlo crocante al horno con aceite de oliva, pimienta y un toque de limón; saltearlo en aceite con ajo y pimienta; incorporarlo como relleno de tartas o en guisos (se puede preparar con porotos o lentejas).