12, Enero 2021
ESI, diversidad y perspectiva de género
A 17 años de la sanción de la Ley 26.150 que dio origen al Programa Nacional de Educación Sexual, en Vida & Salud entrevistamos a Candela Mazzitelli, Licenciada en Psicología con especialización en Estudios de Género y ESI, integrante de la Asociación Civil “Preservate”.
¿Por qué es importante la Educación Sexual Integral?
“Creo que la Educación Sexual Integral es de vital importancia para las infancias y adolescencias ya que les brinda herramientas para ser más libres, para poder cuidarse más a sí mismos y también cuidar a otros.
Promueve la salud y exploración de la sexualidad, el conocimiento de nuestros derechos en relación a la salud sexual y reproductiva. Nos brinda herramientas para la prevención de infecciones y enfermedades. Acompaña en el desarrollo de relaciones saludables; nos ayuda a comprender sobre el consentimiento; combate el bullying y la discriminación. Fomenta la valoración de la diversidad, la prevención y detección de violencias, la distinción de situaciones de acoso y abuso. Nos acompaña a poder conocer y hablar de nuestra emociones.
La ESI genera empoderamiento sobre nuestras decisiones a base de información, reduce tasas de embarazos no deseados, rompe con estereotipos de género. Nos acompaña a sabernos sujetos de derecho desde la niñez”.
En el hogar, en la escuela, en clubes, ¿cómo abordar la Educación Sexual en los diferentes ámbitos?
“La Educación Sexual Integral tiene contenidos organizados según la etapa de vida de cada persona. No todos los contenidos son para todas las edades o momentos. Existen muchos recursos para incorporar la ESI en diferentes ámbitos. Lo fundamental siempre será que el campo de comunicación se encuentre abierto. Abrirnos a preguntas, abrirnos al diálogo, abrirnos a la posibilidad de no saber y tener que salir a investigar”.
Según tu experiencia profesional, ¿cuáles son los cambios positivos que se registraron a partir de la ESI en las escuelas?
“Sabemos que hay un gran porcentaje de casos de violencia sexual contra niños, niñas y adolescentes que sucede dentro de los hogares. Ahí está la respuesta sobre por qué no es posible dejar únicamente en manos de la familia la educación sexual.
La escuela, a través de la Educación Sexual Integral, viene a contener, a acompañar, a mostrar una forma de mediar entre infancias y adolescencias y sus familias, brindando herramientas para que puedan poner en palabras distintas experiencias.
Los espacios de ESI en las escuelas, o en lugares de educación no formal, son esenciales para la prevención y detección de casos de abusos”.
“La ESI es de vital importancia para las infancias y adolescencias ya que les brinda herramientas para ser más libres, para poder cuidarse más a sí mismos y también cuidar a otros“
¿De qué forma se promueve la inclusión desde la primera infancia?
“En realidad debemos empezar por los adultos. Somos nosotros quienes estamos ´chipeados´ por enseñanzas llenas de exclusión y violencia en todos los ámbitos. Desde lo que experimentamos en nuestras familias, lo que nos han transmitido en la escuela, lo que absorbemos de los medios de comunicación, lo que nos muestran las políticas públicas.
Los niños no nacen con prejuicios, somos los adultos quienes vamos llenando nuestras experiencias de prejuicios y eso transmitimos a las infancias.
También es necesario romper con el adultocentrismo que nos indica que son los adultos quienes tienen que depositar el conocimiento en las infancias. Ellos también tienen mucho que enseñarnos, la ESI habla de esto. El conocimiento en construcción con otros es fundamental, y la comunicación asertiva juega un papel muy importante en este punto. Tenemos que escuchar más, dialogar más, y darle más lugar a lo que tienen para decir los niños y niñas”.
¿Cómo educar en la diversidad?
“Para educar en la diversidad hace falta romper con varios esquemas que traemos desde nuestra propia educación y crianza. Es necesario poner sobre la mesa que lo que nos mostraron como ´natural´ en verdad son construcciones sociales que pueden desaprenderse para dejar entrar a la diversidad en todos sus aspectos.
A partir de esta educación, los niños van a poder tener un mejor vínculo consigo mismo y también con sus pares”.
“Con perspectiva de género podemos cuestionar (o al menos ser conscientes de) nuestros privilegios”
¿Qué importancia tiene introducir la perspectiva de género en las aulas desde la primera infancia?
“Me gusta pensar que la perspectiva de género es como cambiarnos los anteojos para mirar con otro color. Lo que antes veíamos rosa y celeste (de forma binaria), con la perspectiva de género se ve multicolor.
Y es necesario comenzar a valorar todos esos colores porque hay tantas maneras de existir, como personas en el mundo.
Mirar, educar, trabajar, socializar, desde una perspectiva de género significa cuestionar los estereotipos con los que fuimos criados y abrir la posibilidad de elaborar nuevas formas de socialización y relación entre las personas. Esta perspectiva plantea la necesidad de marcar y hacer algo por las desigualdades que existen entre los géneros.
La discriminación y violencia de género tiene su base en la constante reproducción de estereotipos. Entender que los mismos son construcciones sociales es muy importante. Quiere decir que se pueden revisar, que se pueden romper, que no son naturales. Con perspectiva de género podemos cuestionar (o al menos ser conscientes de) nuestros privilegios.
Esta manera de mirar, nos permite agruparnos colectivamente y comenzar a construir cultura desde la diversidad. Significa aportar, cualquiera sea nuestro lugar social, a que los niños al crecer no tengan que recuperarse de su infancia. De los daños que les hicieron los mandatos culturales, sociales y familiares”.
“Lo que antes veíamos rosa y celeste (de forma binaria), con la perspectiva de género se ve multicolor“