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12, Enero 2021

“La inteligencia artificial nos obliga a desarrollar una mentalidad más crítica”

La Inteligencia Artificial (IA) es parte integral de nuestra cotidianeidad, con ella interactuamos gran parte del tiempo. Su presencia es cada vez más evidente en numerosas
aplicaciones que empleamos diariamente. Para conocer más sobre la temática, conversamos
con Matías Karlsson, ingeniero informático, co-fundador, director y CTO de diversas empresas tecnológicas.

Ing. Matías Karlsson

¿Cómo definís a la IA?

“La IA es un conjunto de algoritmos que diseñamos con la intención de llevar a cabo tareas que no fueron delineadas específicamente para ellos. En esencia, estos algoritmos son capaces de aprender y adaptarse a través de una serie de ejemplos y resultados esperados que les proporcionamos. Esto se logra mediante la creación de modelos matemáticos que, una vez entrenados con suficiente cantidad y calidad de datos, pueden hacer predicciones sobre nuevas situaciones o elementos desconocidos.

Estos modelos se construyen de manera tal que pueden generalizar a partir de los datos de entrenamiento para responder a nuevas entradas que no han visto antes. Es un proceso similar al aprendizaje humano: al igual que un niño aprende a identificar un gato al ver suficientes ejemplos de gatos, una IA puede aprender a realizar tareas al ser expuesta a suficientes ejemplos relevantes durante su entrenamiento”.

¿Cuáles son los aspectos positivos de la IA? ¿Y los riesgos?

“Los beneficios de la IA son notorios y crecientes, y en el corto plazo, creo que se volverán aún más evidentes. En primer lugar, la IA puede impulsar un aumento exponencial en la productividad en numerosos campos, desde la industria hasta la atención de la salud, pasando por la educación. Esto se debe a su capacidad para automatizar tareas rutinarias, lo que libera tiempo humano para enfocarse en tareas más complejas y creativas.

En segundo lugar, tiene el potencial de democratizar el conocimiento, ayudando así a reducir las brechas de acceso a la información y las oportunidades, y acelerar el progreso humano en general.

Sin embargo, también es importante reconocer que conlleva riesgos. Dado su potencial para la manipulación de la información, por ejemplo, puede ser utilizada para producir ‘fake news’ o noticias falsas que son cada vez más difíciles de distinguir de las verdaderas. Además, las estafas en línea podrían volverse más convincentes y sofisticadas.

Ocurre que la IA nos obliga a desarrollar una mentalidad más crítica y a cuestionar lo que vemos y oímos. En lugar de aceptar pasivamente todo lo que se nos presenta, debemos aprender a evaluar y cuestionar la información, a distinguir entre fuentes confiables y no confiables, y a entender cómo y por qué se genera cierta información”.

¿Cómo impacta la inteligencia artificial en la educación?

“Representa un desafío considerable, especialmente en los sistemas educativos tradicionales que aún están aprendiendo a integrar herramientas como las computadoras e Internet de manera efectiva. Sin embargo, la necesidad de hacerlo es cada vez más evidente. Los estudiantes están utilizando estas tecnologías, quieran o no los educadores, y prepararlos para usarlas de manera efectiva es esencial para equiparlos para un futuro en el que estas herramientas serán omnipresentes.

Entonces, la pregunta es: ¿cómo podemos incorporar la IA en la educación de manera efectiva? Creo que la respuesta se relaciona con lo que mencioné anteriormente: los seres humanos nos destacamos cuando ejercemos nuestro juicio, creatividad y pensamiento crítico. En lugar de pedirle a un estudiante que memorice una definición o una serie de hechos, una tarea que va en contra de cómo nuestro cerebro está biológicamente diseñado para aprender, podríamos pedirles que compartan sus opiniones, formulen hipótesis y defiendan sus ideas”.

¿Qué opinás sobre los prototipos de chatbot de IA que surgieron en el último tiempo?

“En los últimos años, hemos presencia- do un notable aumento en la relevancia de los modelos generativos, particu- larmente con la llegada de ChatGPT, un modelo de IA desarrollado por OpenAI. Estos modelos generativos, en lugar de simplemente clasificar la información, tienen la capacidad de generar contenido nuevo, lo que puede resultar en interacciones más ricas y creativas.

Este avance significativo en la tecnología de chatbots ha creado un cambio de paradigma en el mercado. ChatGPT se ha posicionado como un ´copiloto´ para el día a día, capaz de ayudar en una amplia gama de tareas, desde responder correos electrónicos y redactar textos, hasta proporcionar información y asesoramiento en una variedad de temas. Su capacidad para interactuar de manera natural y efectiva ha hecho que la IA sea más accesible y útil para el público en general”.

“La IA permite democratizar el conocimiento, ayudando así a reducir las brechas de acceso a la información”.

¿Cuál es el motivo por el cual estos sistemas de chat logran tanto éxito y aceptación?

“Los chatbots de IA tienen la capacidad de proporcionar respuestas rápidas y precisas a las consultas de los usuarios. Esto puede aumentar significativamente la eficiencia en situaciones en las que se requieren respuestas instantáneas, como el servicio al cliente, y también puede mejorar la satisfacción del usuario al proporcionar la información necesaria de manera oportuna.

Además, están disponibles las 24 horas del día, los 7 días de la semana, lo que proporciona una conveniencia significativa.

Existe también un cierto grado de encanto e ilusión en interactuar con un sistema ´inteligente´. Durante décadas, las películas de ciencia ficción nos han inculcado la idea de sistemas y máquinas inteligentes con las que podemos interactuar de manera similar a como lo haríamos con otro humano. Ahora, con los chatbots de IA, ese sueño parece estar cada vez más cerca de la realidad, lo que puede aumentar aún más su atractivo y éxito”.

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