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12, Enero 2021

¿Cómo cuidar el medio ambiente desde la cocina?

Compartimos algunos pequeños hábitos del día a día que pueden colaborar para ser sustentables y cuidar el medio ambiente al momento de cocinar.

La cocina es uno de los espacios de la casa que se utilizan casi a diario. Teniendo en cuenta que ahí mismo se utilizan distintos tipos de recursos, te invitamos a conocer 7 tips para disminuir el impacto ambiental con acciones simples.

1 – Reciclar

En cada cocina se descartan diariamente varios productos pero la buena noticia es que el 80% de ellos pueden tener una segunda vida. Los envases de plástico, las botellas de vidrio y las latas se pueden separar de la basura orgánica para desecharlos secos y limpios en los puntos verdes de cada ciudad o barrio.

2 – Compostar

¿Qué hacer con la basura que no va en el tacho verde? Para los residuos orgánicos está la opción de compostar, un método consiste en juntar los restos en una compostera y dejar que con el efecto del del sol hagan su proceso. 

✅ Qué compostar: frutas, verduras, legumbres, cereales, cáscara de huevos, cáscaras y carozos de frutas y verduras, yerba, café, saquito de té e infusiones (el hilo sí, la etiqueta no), cáscaras de cítricos, flores, hojas secas y restos de ramas. 

❌ Qué no compostar: ningún tipo de carne, huesos u otro tipo de resto animal, lácteos, restos con grasas o aceite,  pañales, heces de perros y gatos.

Si tenés dudas, te recomendamos seguir leyendo esta nota:

Compost: un uso inteligente de los residuos orgánicos

3 – Evitar los productos de un solo uso

En cada cocina hay varios productos que se utilizan una sola vez y luego van directo al tacho. Los elementos reutilizables son una muy buena opción porque bajan la cantidad de basura generada y además son amigables con el bolsillo. Algunos ejemplos más ecológicos:

  • Elegir filtros de tela en lugar de los de papel.
  • Comprar té en hebras en lugar de en saquitos.
  • El papel film puede ser reemplazado con telas enceradas
  • El rollo de servilletas de papel al ser de un solo uso no es la mejor opción. Siempre que se pueda, es mejor usar trapos y servilletas de tela de algodón.
  • Un purificador de agua es más ecológico —y a la larga más barato— que comprar botellas de plástico.

4- Comprar frutas y verduras locales y de estación

Hay productos que vienen de distintas partes del mundo o que no suelen cultivarse en esa época del año. Para que haya tanta oferta se invierte mucha energía en transporte y conservación, lo cual es bastante perjudicial para el planeta. Siempre es mejor elegir alimentos frescos que hayan sido producidos localmente.

5- Reemplazar la esponja de plástico por la vegetal

Las esponjas tradicionales para la cocina están fabricadas a base de petróleo, por lo que se utilizan recursos escasos y contaminantes. Además es un elemento no reciclable ni compostable, por lo que cuando son descartadas terminan en los basurales durante varios siglos.   

Las esponjas vegetales son una excelente alternativa: tienen los mismos beneficios que una de plástico, no rayan la vajilla, tardan bastante tiempo en gastarse y al ser 100% naturales son compostables por lo que tienen un menor impacto ambiental

6- Comprar electrodomésticos de bajo consumo

Cuando se compra un electrodoméstico nuevo, es preferible optar por los que tienen etiquetas A o B. ¿Cuáles son las ventajas? Al tener menor gasto energético cuidan el planeta y bajan los costos en tu factura de luz.

7- Evitar el desperdicio

Todos los días miles de toneladas de alimentos terminan en la basura. Este número bajaría mucho si: 

  • Se compra sólo lo que se va a consumir, para esto lo mejor es organizar las comidas de antemano.
  • No servir porciones gigantes porque, si no se termina el plato, lo más probable es que los restos vayan directo al tacho. Es preferible poner en la mesa porciones más pequeñas y repetir.
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