12, Enero 2021
Vasectomía: crecen las consultas sobre la esterilización masculina.
Si bien es una alternativa de anticoncepción sencilla e igual de eficaz que la ligadura de trompas, siguen apareciendo dudas al respecto. Por eso, conversamos con el Urólogo Ernesto Cordeiro Feijoo, quien nos explica los detalles de la intervención.
La elección de los métodos anticonceptivos desde hace muchos años ha sido, casi en su totalidad, responsabilidad de las personas gestantes. Aunque quienes pueden concebir más hijos son los hombres. Durante un año, una mujer puede concebir un solo hijo, mientras que el público masculino puede embarazar una cantidad bastante ilimitada.
La falta de conocimiento sobre la vasectomía, así como la asociación errónea con la castración, hizo que muchos hombres no se muestren dispuestos a someterse al procedimiento. Sin embargo, la tendencia en estos últimos tiempos cambió y la consulta a los especialistas creció considerablemente.
¿Qué es la vasectomía?
“La vasectomía es un método quirúrgico definitivo y su fundamento es el control de la natalidad. Constituye uno de los métodos anticonceptivos más eficaces, con un de 99% para prevenir embarazos”, explica Cordeiro Feijoo
El procedimiento consiste en la ligadura y sección de ambos conductos deferentes que son dos estructuras a través de las cuales se movilizan los espermatozoides desde los testículos hacia las vesículas seminales y conductos eyaculadores para unirse allí con el líquido seminal y formar el semen. Esta cirugía es mínimamente invasiva y quienes la hayan realizado no pueden embarazar a una persona con capacidad de gestación.
La Vasectomía se puede realizar con anestesia local o regional. En general, en un contexto ambulatorio con internación previa. Esta operación tiene por objetivo eliminar los espermatozoides del semen, aunque, como detalla el Urólogo “los testículos siguen produciendo espermatozoides que son normalmente absorbidos por el organismo. Las glándulas seminales y la próstata siguen produciendo la misma cantidad de líquido. Así en la eyaculación se emite la misma cantidad de líquido seminal, pero éste no contiene espermatozoides”.
Es importante aclarar que la esterilidad no es inmediata, “la fecundidad persiste mientras existan espermatozoides viables en el semen, por lo cual se recomienda a los pacientes operados que durante las doce semanas posteriores a la intervención utilicen otro método anticonceptivo. Por lo menos, hasta que un espermograma de control permita demostrar la ausencia de espermatozoides vivos en el líquido seminal”, explica Cordeiro Feijoo.
¿Cómo es la recuperación tras la intervención?
“La recuperación posterior a la intervención suele ser muy rápida. No obstante, es común la necesidad de analgésicos, antinflamatorios e incluso la aplicación de hielo sobre la zona intervenida y sobre el escroto”. Y, luego agrega: “en general se considera que la vasectomía es una intervención de bajo riesgo. Sin embargo, se la debe asumir como cualquier otra cirugía y respetar todos los cuidados necesarios que garantizan la seguridad del paciente”.
¿Puede alterar el desempeño sexual?
Entre los principales temores del público masculino, aparece la creencia que la vasectomía puede alterar los niveles de testosterona, causar disfunciones sexuales, sin embargo, esto corresponde a un mito, “la vasectomía no altera la producción de hormonas sexuales. Por lo tanto, los hombres no deben tener trastornos relacionados a la disminución de estas hormonas como por ejemplo, la disfunción sexual, disfunción eréctil, pérdida del deseo sexual o ausencia de la eyaculación”, explica el Médico Urólogo.
De hecho, hay quienes dicen que el deseo sexual puede verse incrementado, dado que se pierde el temor a la posibilidad de embarazo y les permite entregarse a las relaciones sexuales de forma más relajada.
¿Es reversible?
“El objetivo de la vasectomía es que sea definitiva, por lo tanto, que no se pueda revertir. Durante el procedimiento quirúrgico el cirujano utiliza todos los métodos técnicos para interrumpir de manera definitiva la conexión de esos conductos anteriormente mencionados y el paso de los espermatozoides a través de ellos”, señala Cordeiro Feijoo.
Aunque, en ciertas ocasiones es posible revertirla en un paciente que cambia de opinión, pero requiere de una cirugía mucho más compleja. En general, con la necesidad de microcirugías y la utilización de microscopios que suelen ser muy costosos.
El éxito de la reversión oscila entre el 63% y el 89%, es decir, no es sencillo que un microcirujano pueda garantizar el éxito de esta reversión. Sin embargo, es necesario aclarar que es muy bajo el porcentaje de personas que se arrepienten luego de hacer la intervención.
Planificación familiar.
La vasectomía genera que la planificación familiar involucre a los hombres y deje de ser una responsabilidad exclusiva de las mujeres, posibilitando un avance en la igualdad de género. Generando, también, un impacto positivo en el deseo de ellas, que no tiene que preocuparse de los efectos de la anticoncepción.
Por último, es necesario destacar que la vasectomía es un método de prevención del embarazo, pero no así de Enfermedades de Transmisión Sexual, y, en el caso de no tener una pareja sexual segura y estable, se recomienda la utilización del preservativo.
